Chihuahua, Chihuahua. La escasez de agua para riego tiene colapsada la producción tradicional de alimentos como la manzana en este Estado que ocupa la cuarta posición como productor de comestibles a nivel nacional.
“Una hectárea más de riego, Chihuahua ya no la soporta. Ya no tenemos agua suficiente para sostener esto”, reconoció René Almeida Grajeda, Secretario de Desarrollo Rural de Chihuahua en entrevista con Evlyn.Online
Esta escasez hídrica para el riego que impacta en la producción de alimentos que se consumen en México, se enmarca en el enfrentamiento entre agricultores de Chihuahua y la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
La disputa por la administración del agua se agudizó en 2020 cuando agricultores de esta entidad se enfrentaron con miembros de la Guardia Nacional que custodiaban las presas y una agricultora que participaba en las protestas murió presuntamente por disparos de los militares.
René Almeida consideró que el conflicto hídrico se acentuó por la prolongada sequía que enfrenta el Estado desde el año pasado y por el cumplimiento del tratado entre México y Estados Unidos que regula la manera en la que ambos países deben repartir el agua de los ríos Bravo y Colorado al tiempo que se compromete el almacenamiento de la presa La Boquilla, en Chihuahua.
“Esa comunicación que nosotros estuvimos pidiéndole a la Conagua con los productores cada vez se tornaba más álgida, más difícil, hasta caer en lo que todo mundo conocemos. Faltó dialogo.
Yo creo que las medidas extremas de militarizar las presas es algo que por supuesto, molestó a la gente y a todo mundo no solo en Chihuahua sino en todo el país”, reflexionó.
En Chihuahua se siembran un millón 100 mil hectáreas de agricultura de las cuales, 550 mil hectáreas son de riego y otras 550 mil de temporal.
La entidad ocupa el cuarto lugar en la producción de alimentos como manzana, maíz, algodón, nuez, avena, entre otros cultivos. Además, se ubica en el cuarto lugar a nivel nacional en la producción de leche.
El limitado acceso hídrico ha obligado a la Administración de Javier Corral a transformar sus patrones tradicionales de producción de alimentos para migrar a cultivos que sean menos demandantes de agua pero que sean rentables y generadores de ingresos para los 120 mil productores agrícolas y los más de 17 mil productores ganaderos.
“En la cuestión de manzana que somos el Estado número uno ya estamos dejando las plantaciones antiguas que eran de 250 o 300 árboles por hectárea, por 2 mil 500 árboles por hectárea, pero mucho más pequeñitos, menos demandantes de agua, menos follaje y productores de mayor calidad.
En la zona serrana, la zona indígena, estamos induciendo cultivos que, en un mercado muy local, le permitan a la gente obtener ingresos como es el caso del aguacate, ya se quedaron establecidas las primeras huertas”, explicó.
Los agricultores y ganaderos de Chihuahua tienen un alto impacto en la producción de alimentos que se consumen en todo el territorio nacional. Es probable que, si usted degusta un producto lácteo o una manzana, tenga su origen en esta entidad, no obstante, el Presidente Andrés Manuel López Obrador les ha acusado de acaparar el agua.
“Somos productores agrícolas y productores de alimentos en el País y así quisiéramos que se nos viera. Los agricultores de Chihuahua y de todo México somos parte de este país, nos sentimos parte del desarrollo económico del país y hacernos sentir que estamos perjudicando el desarrollo, por supuesto que duele”, reviró René.
En Chihuahua, recalcó, los productores agrícolas y ganaderos quieren seguir produciendo y el sueño de cada uno es mantener una reserva de agua para sus unidades de producción sin que ello afecte al medio ambiente.
LA URGENCIA DE TECNIFICAR EL RIEGO
Ante la escasez de agua que enfrenta Chihuahua es urgente tecnificar el riego y medir el consumo hídrico de agricultores y ganaderos.
El Secretario de Desarrollo Rural del Estado, René Almeida Grajeda, detalló que se hace un esfuerzo por otorgar garantías líquidas para que los productores accedan a créditos, pero no es suficiente porque se requieren subsidios de la Conagua.
“Hemos estado buscando el acercamiento con la autoridad del agua, con Financiera Nacional, con SADER, a efecto de que hagamos un plan ambicioso a mediano plazo para eficientar el uso del agua y empezaríamos por lo primero que es una regularización.
Nos han comentado que están proyectando la regulación del uso del agua. Están trabajando en una radiografía de cómo están organizados los productores, yo veo con buenos ojos este proyecto porque necesitamos saber cuántos somos, quiénes somos, en dónde estamos, cuánto estamos utilizando y en qué parte del uso legal del agua estamos”, señaló.
Los productores chihuahuenses, subrayó, son los primeros interesados en que las autoridades competentes establezcan una visión clara de la gestión del agua en la entidad.
Pero en la actualidad, ni la propia autoridad estatal tiene claridad de la gestión hídrica que tienen los productores agrícolas de riego.
“El uso del agua no sabemos quién lo tiene con exactitud. No estoy facultado para tener un padrón, pero sí hemos hecho ejercicios para saber más o menos cuántos somos y estamos hablando de unos 7 mil productores de riego quizá podamos llegar a 8 mil.
El 85 por ciento son productores de 20 o 25 hectáreas hacia abajo. Son productores relativamente pequeños, el ingreso que puede dar una cantidad así de hectáreas es poco solvente y hay productores más pequeños que todavía tienen mayor problema”, agregó.
La tecnificación del riego, la reconversión productiva y el valor agregado, serán claves en el futuro productivo agrícola y ganadero de Chihuahua.
CONTRA LA OPACIDAD EN EL MANEJO HÍDRICO
El conflicto por el agua en Chihuahua abre la oportunidad de transitar a esquemas de transparencia en la gestión del recurso, por ejemplo, que al productor se le informe cuál es el destino del agua que almacenan las presas o los ríos y lagos.
“Eso es algo que la gente también se pregunta. Va usted a una comunidad y dicen: Por aquí pasa el agua y ¿qué se hace con ella? entonces, necesitamos decirle al productor en qué se usa esa agua, aunque a él no le toque nada”, planteó René Almeida Grajeda, Secretario de Desarrollo Rural de Chihuahua.
Además, subrayó que es fundamental que la Comisión Internacional de Límites y Agua (CILA) informe públicamente cómo se cumplió con el tratado de agua entre México y Estados Unidos.
“Nosotros estamos pidiendo aquí en Chihuahua que la CILA que depende de la Secretaría de Relaciones Exteriores, informe públicamente cómo fue que se pagó o cómo se cumplió con este vencimiento recién transcurrido en octubre al Tratado Internacional con Estados Unidos y que sea una práctica constante, una transparencia permanente de la autoridad del agua”, demandó.
La transparencia en la gestión del agua, dijo, también hace inminente que la Conagua habilite su oficina de la Dirección Local de Chihuahua, donde se solicitó la renuncia de al menos 43 funcionarios bajo el argumento de que presuntamente incurrieron en actos de corrupción.
“Yo no estoy de acuerdo en tener una oficina de la Conagua cerrada. Eso lo que nos va a generar es mayor anarquía porque si no hay quién me cuide, yo voy y hago lo que quiero. Chihuahua es enormemente grande, que se necesita más gobierno, claro que se necesita más gobierno, pero lo que no puede dejar de existir es el gobierno porque las aguas son de interés nacional para beneficio de los ciudadanos”, sostuvo René Almeida.
El Secretario de Desarrollo Rural del Estado confió en que la Conagua, como autoridad competente, tenga el liderazgo que se requiere para sumar a los agricultores y ganaderos en planes de una gestión más eficiente del agua de riego.
“Si ahorita tenemos 10 mil metros cúbicos por hectárea, podemos reducirlos a 6 mil 500 o 7 mil metros cúbicos por hectárea. Estaríamos hablando de un 30 por ciento menos de agua con sistemas de riego presurizados”, añadió.
Los Distritos de Riego 113 en Camargo, 105 en Delicias y 90 en Ojinaga, tienen como principal fuente de abasto hídrico a las tres grandes presas del Estado: La Boquilla, La Virgen y El Granero.
