¿Qué tienen en común el huracán OTIS de categoría 5 que tocó tierra en Acapulco en octubre de 2023, las inundaciones en España a consecuencia de la Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) ocurrida en 2024 y los incendios forestales de California ocurridos a principios de 2025? Los expertos no tienen duda: es la expresión del cambio climático
Ciudad de México. Si usted pudiera tomarse un tiempo y revisar un álbum fotográfico de las catástrofes climáticas ocurridas en los últimos años seguramente se encontraría con imágenes del puerto de Acapulco destruido por el huracán OTIS, las comunidades del este de España inundadas por la DANA y más recientemente, los incendios forestales de California que afectaron la zona metropolitana de Los Ángeles.
¿Podría definir quiénes son los principales afectados en estas catástrofes climáticas?
Las personas, afirman los expertos.
El cambio climático es la mayor amenaza que enfrenta la humanidad a nivel global porque, aunque estos eventos meteorológicos extremos ya se presentaban, está aumentando su frecuencia e intensidad, plantea Adrián Fernández Bremauntz, director ejecutivo de la Iniciativa Climática de México (ICM)
“Más frecuencia, más intensidad. La intensidad de los fenómenos y que se estén presentando de manera frecuente eso ya no es normal, eso es cambio climático. Una de las grandes conclusiones del sexto reporte del IPCC (del panel de expertos de la ONU en su sexto y último reporte) es que hay evidencia demostrada, medible, de los impactos del cambio climático en cada rincón del planeta”, explica Adrián en entrevista con Evlyn.Online

El huracán OTIS fue un ciclón tropical de categoría 5 que, el 25 de octubre de 2023, tocó tierra en Acapulco, Guerrero y dejó al menos 45 muertos y 24 desaparecidos la mayoría de ellos marineros que se encontraban cuidando embarcaciones durante la tormenta. Además, ocasionó causó grandes destrozos en la entidad.
Adrián reflexiona respecto a que cada año en México hay una temporada de huracanes, lo cual es normal pero enseguida cuestiona: “¿qué pasó con OTIS?”
“Vino una cosa muy diferente a lo que antes se conocía debido a lo elevado de las temperaturas del mar. Empezó a gestarse, en muy pocas horas, un sistema climático que desembocó en este huracán categoría 5 y aquí es donde viene la parte novedosa que asustó a los científicos porque fue apenas a las 6 o 7 de la noche de la misma noche donde golpeó OTIS a Acapulco que, si revisamos la información del Centro de Huracanes de Florida, hay un comunicado que decía: se está configurando una circunstancia climatológica que en pocas horas golpeará a Acapulco y utilizan la palabra pesadilla. Están advirtiendo que se está configurando un huracán categoría 5 que será una pesadilla que en pocas horas golpeará Acapulco”, agrega
Otro ejemplo de la manera en la que el cambio climático exacerba los eventos meteorológicos, dice, son los incendios forestales ocurridos en los Ángeles, California.
“Los vientos de Santa Ana, la sequía, los fuegos, todo eso siempre ha existido pero cuando se exacerba algunos de esos parámetros: temperaturas récord año con año en muchos lugares, cambios en los patrones pluviales en todo el mundo, más sequías prolongadas y luego vienen estos vientos cuando tenemos una gran cantidad de biomasa en un área muy grande, en este caso en las zonas desérticas de California que, además colinda con asentamientos humanos históricos, entonces se dio la tormenta perfecta. Y aquí tenemos algo que nos expone, que nos desnuda lo impotente que somos ante estos fenómenos que están siendo exacerbados por el cambio climático”, enfatiza.
Considerando que el impacto del cambio climático ya es una realidad y que México es vulnerable, Fernández Bremauntz propone que el gobierno mexicano formule un plan de adaptación mediante el cual se identifiquen los sectores y geografías más vulnerables y en consecuencia, se determinen acciones para darles resiliencia.
“Cada sector ya sea agricultura, energía, economía, todos, cada uno debería de trabajar intensamente con apoyo de expertos en identificar cuáles son esos principales impactos del cambio climático que están sufriendo y cada estado de la república debería de formular un plan de adaptación a los impactos del cambio climático. Una vez que ves la manera en cómo te está pegando el cambio climático día a día, pues implementas medidas de muchos tipos, por ejemplo, revisar las normas de nuevos asentamientos”, señala.
A nivel federal, se dice optimista porque hay personal competente en el sector ambiental que puede diseñar políticas públicas encaminadas a un plan de adaptación al cambio climático más robusto, pero a nivel local, en los Estados y Municipios, el reto es mayor porque los presupuestos y las capacidades son menores.

A MAYOR TEMPERATURA, MÁS VULNERABILIDAD
Apenas el año pasado México resintió los efectos de fenómenos climáticos extremos como el huracán Milton de categoría 5 y considerado como el ciclón tropical más fuerte del mundo en lo que va de 2024 tras tocar tierra en Florida.
Unos meses después, del otro lado del Atlántico, ocurrieron las lluvias torrenciales de la DANA en España.
Ambos fenómenos meteorológicos ocasionaron pérdida de vidas, una crisis económica y de salud que afecta a la población.
“Un factor determinante sí es el incremento de temperatura tanto en el mar como en el aire”, afirma Alejandra Margarita Méndez Girón, ex coordinadora general del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) en entrevista con Evlyn.Online
La transición climática, por ejemplo, entre el verano- otoño u otoño-invierno, dice que es difícil porque interactúan sistemas fríos con calientes y esa diferencia de temperatura provoca que sean fenómenos más extremos. Por ello, tiene claro que lo más importante es trabajar para enfriar la atmósfera.
“Aquí lo que se debe de trabajar es en el descenso de la temperatura a nivel mundial ya que la atmósfera siempre busca el equilibrio y lo que pasa en un lado interfiere en otro. Es una sola atmósfera y siempre busca el equilibrio. Van a pasar fenómenos extremos en un lado, van a pasar fenómenos extremos en otro, debido a que siempre está en constante movimiento”, enfatiza.
El fenómeno de la Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) ocurrido en España y cuyas imágenes le dieron la vuelta al mundo por la magnitud del daño que causaron a la población, se originó a partir de un sistema de baja presión que se genera en niveles altos de la atmósfera y está compuesto por aire frío, se deriva de un desprendimiento de una masa de aire frío de una corriente de chorro que puede ser polar o subtropical.
“Lo que produce lluvias torrenciales y el mal tiempo es el efecto que existe entre un sistema frío y un sistema cálido. En este caso, la gota fría al estar en contacto con aire cálido en este caso con el mediterráneo genera desarrollo colectivo de nubosidad y por lo tanto las precipitaciones asociadas son lluvias torrenciales que en este caso fueron mayores a 400 milímetros. Esta situación es común que se dé cuando hay periodos de transición entre lo que es del verano al otoño y generalmente ocurre entre los meses de junio a octubre en la zona del Mediterráneo.
Ahora, no todas las DANAS generan siempre daños como los que generó esta DANA. Todo tiene que ver en cuanto a la diferencia de temperatura que existe en el Mediterráneo y la cantidad de nubosidad que hay en la atmósfera. Si no hay suficiente humedad, puede existir la DANA, puede existir la gota fría pero las precipitaciones no son tan extremas o de carácter torrencial. Pero si hay demasiada humedad y hay altas temperaturas entonces sí se pueden generar este tipo de situaciones”, aclara.
En México, explica que sí es factible que pueda ocurrir una DANA pero no de tanta intensidad como la ocurrida en España.
“Sí podría haber la posibilidad de una DANA pero que no es comparable con las que se pueden generar en Europa ya que las corrientes en chorro, la cantidad de masa en corriente predomina más en latitudes medias y altas. Lo que sí podemos tener es un antecedente de pequeñas gotas frías, por ejemplo, tuvimos una muy bajita, una depresión que fue muy pequeñita pero que no fue un fenómeno extremo y que causó lluvias en la zona de San Juan de Aragón”, agrega.
Los eventos extremos que más afectan al país, recalca, son los ciclones tropicales y tornados.
PRENSA ES CLAVE EN COBERTURA DE CRISIS CLIMÁTICA
En México como en el resto del mundo es fundamental que el periodismo documente la crisis climática con rigor y si los periódicos, la radio o los medios electrónicos no abren espacios para la cobertura de la agenda ambiental es simplemente por falta de interés, plantea Javier Moreno Barber, director del Máster en Periodismo de la Universidad Autónoma de Madrid y ex director del diario El País en España.
Al impartir el taller “Periodismo en tiempos del caos” en San Miguel Allende, Guanajuato, el periodista español se toma un momento para reflexionar respecto el rol que tienen los periodistas en la cobertura de la agenda ambiental cuyos problemas se exacerban con el cambio climático.
Cada vez son más los medios de comunicación, dice, que incorporan una sección especial que aborda la crisis climática.
“Sociedades más avanzadas, Inglaterra, ya lo han hecho. Por ejemplo, The Guardian ya hace tiempo que decidió llamarle no cambio climático sino la crisis climática o la emergencia climática, cambian la denominación y de repente ya crean espacios dedicados exclusivamente a esto. No es si tengo una noticia, sino que tengo un equipo dedicado a producir noticias de esto, a seguir estos fenómenos, y esto tiene su espacio. Hasta el Financial Times que es un periódico, sí, básicamente de economía y política mundial, ha creado una sección diaria: es una página, son dos, o en internet son 10 o 15 artículos dedicado a la crisis climática. Y eso lo han hecho porque han entendido la gravedad del asunto”, apunta.
En España, por ejemplo, señala que el fenómeno de la DANA que ocasionó lluvias torrenciales y al menos 200 muertos, marcó un parteaguas en la cobertura periodística.
“Para nosotros este fenómeno de la DANA o de las lluvias torrenciales que hemos tenido en Valencia ha sido un parteaguas en España. Hasta ahora, el cambio climático en la discusión, política también, era un poco remota. Podíamos leer que se había extinguido una especie no sé dónde, que los glaciares se estaban derritiendo, pero cuando de repente, en una zona que está acostumbrada a las lluvias torrenciales, yo soy de Valencia además y allí conocemos bien, esto ha pasado siempre, pero la intensidad, la violencia de esta tormenta, los más de 200 muertos que ha producido, realmente suponen un cambio de escala total. La percepción ha cambiado y la gente ha entendido que no estamos hablando ya de dos especies de pescados que se extinguen, sino de que nos estamos jugando la vida y sobretodo, nos estamos jugando la vida de nuestros hijos”, agrega.
La cobertura periodística de fenómenos extremos a consecuencia del cambio climático, enfatiza, no es banal y tiene rostro.
“Por desgracia tienen que suceder cosas así para que la gente empiece a entender que hablar de medio ambiente, de crisis climática-como me gusta a mí llamarlo-no es banal. Hay que hablar de eso y hay que ponerle rostro. Desgraciadamente en España, ahora mismo el rostro del cambio climático, son más de 200 personas muertas”, lamenta.
Aunque fenómenos climáticos como la DANA son repetitivos, Moreno Barber estima que la percepción de la crisis climática cambió debido a la intensidad con la que afecta a la sociedad.
“Esto ha pasado siempre, pero la intensidad, la violencia de esta tormenta, los más de 200 muertos que ha producido, suponen un cambio de escala total. Yo creo que la discusión ha cambiado, la percepción ha cambiado y la gente entendió ya que no estamos hablando de dos especies de pescados que se extinguen, sino de que nos estamos jugando la vida”, subraya.
Para quien fue también director de El País América con sede con Ciudad de México entre 2018 y 2020, los medios de comunicación que no cubren la agenda ambiental es por falta de voluntad periodística.
“Si los periódicos, las radios, los portales de internet en España y en México no tienen esos espacios (de cobertura a la crisis climática) es porque no quieren y resulta francamente sorprendente y es descorazonador que, a estas alturas, por ejemplo, en España, con 200 muertos recientes y todo lo que está sucediendo, los responsables de los medios de comunicación no hayan tomado este asunto con la gravedad que se merece”, plantea.
Será trabajo de los periodistas, continúa, cubrir la agenda ambiental no como noticias anecdóticas sino dimensionando con su trabajo la crisis que representa el cambio climático en las sociedades.
“Pasar de la anécdota a la categoría. No podemos quedarnos en que ha llovido aquí desligado de todo lo demás. Ha llovido aquí, ha habido diez muertos, ha habido estas inundaciones y esto remite a la categoría de emergencia climática. Ese es nuestro trabajo, hacer bien nuestro trabajo y el del ciudadano es más sencillo todavía: es traducir lo que ve y lo que percibe en un voto por opciones que le garanticen o le prometan que desde los gobiernos se van a tomar medidas para atajar esto”, agrega Moreno Barber.