Ciudad de México. En su mensaje de despedida al frente del Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC), Amparo Martínez Arroyo, enfatizó que la lucha contra el cambio climático no es un capricho neoliberal y recalcó que hizo entrar más dinero al país de organismos internacionales, que del presupuesto de la Federación.
El jueves 16 de diciembre, en un encuentro de despedida con el personal que tuvo a su cargo durante ocho años, la también doctora en Ecología admitió que desconoce cómo será el proceso anunciado por el Presidente Andrés Manuel López Obrador para fusionar el INECC a la Semarnat.
Hasta ahora, informó que la reforma administrativa del INECC está en proyecto, pero dijo que ha contribuido con opiniones para que no se despida al personal especializado que tanto ha costado formar.
Al referirse a la lucha contra el cambio climático, subrayó que no se trata de un capricho neoliberal.
“La lucha contra el cambio climático y la protección ambiental no es un capricho neoliberal (aunque habrá quien encuentre como sacarle provecho) es, por el contrario, una lucha contra este sistema socioeconómico que ha causado pobreza, deterioro ambiental, desigualdad social y cuyos efectos en el clima amenazan ahora en primer lugar a los pobres”, expresó Amparo Martínez en su mensaje.
Además, señaló que el INECC obtuvo más financiamiento de organismos internacionales que invirtieron recursos en México para proyectos de mitigación y adaptación al cambio climático en distintos sectores, que del presupuesto federal.
“A pesar de la austeridad que hemos asumido y respetado, hemos logrado que muchos organismos internacionales, comprometidos con el financiamiento a países en desarrollo inviertan en proyectos para mejorar capacidades de adaptación y mitigación en distintos sectores. Podemos afirmar que hacemos entrar mucho más dinero al país que el que nos dan de presupuesto”, agregó.
Si bien el INECC no maneja recursos ni hace gestión o política, reconoció que esos financiamientos internacionales sirvieron para el diseño de proyectos, para la generación de información y para el desarrollo de herramientas metodológicas.
“Proporcionamos también al Estado mexicano la información sobre el estado de la calidad del aire, la contaminación, las emisiones y capturas de gases y compuestos de efecto invernadero, los escenarios de cambio climático y la vulnerabilidad del territorio a eventos específicos”, apuntó.
La información científica se generó en el INECC con toda objetividad, dijo, para que el Estado pueda tomar decisiones con base en conocimiento libre de otros intereses, aunque reconoció que la importancia de esto no siempre se entiende en México.
“Algo que solo pueden hacer los institutos de investigación al servicio del Estado y que es muy diferente al que hacen las universidades y las secretarías, el sector privado y el sector social, porque constituimos un puente entre todos ellos, un integrador de sus necesidades y capacidades. Este papel apenas empieza a entenderse o no entenderse en nuestro país para temas transversales como cambio climático y ambiente”, agregó.
Martínez Arroyo concluyó su mensaje de despedida explicando que el cambio administrativo que prevé al interior del INECC no puede ser inmediato porque ese Instituto fue creado por una ley y hay muchas disposiciones en otras leyes y convenios que tendrán que cuidarse para que salga bien cualquier movimiento.