Ciudad de México. En la antesala del inicio de la temporada de lluvias 2021, Blanca Jiménez Cisneros se prepara para abandonar la Dirección General de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), no sin antes supervisar la incorporación de 100 mil hectáreas productivas de nueva creación a los distritos de riego y admitir que a esa Dependencia le urgen perfiles técnicos altamente especializados en la administración hídrica.

La responsable de la gestión del agua durante los dos primeros años del Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador está a unos días de dejar su cargo público para ser propuesta como embajadora de México en Francia y en entrevista con Evlyn.Online reflexiona respecto a los proyectos que logró concretar y aquellos que quedan pendientes.

Pie de foto: Blanca Jiménez Cisneros, directora general de la Conagua
Pie de foto: Blanca Jiménez Cisneros, directora general de la Conagua

 

Una de sus principales satisfacciones, dice, es impulsar la incorporación de 100 mil hectáreas de nueva creación a distritos de riego, lo cual garantiza que esas zonas de cultivo localizadas en distintos estados del país tengan abastecimiento de agua.

“En total se van a incorporar en áreas productivas cerca de 100 mil hectáreas de nueva creación. Va estar Sinaloa, Nayarit, muchas zonas del sur. En Sinaloa van a ser 20 mil o 30 mil hectáreas, en el Canal Centenario van a ser otras 20 mil y así están repartidas en Sinaloa, Nayarit, Sonora, Tabasco, son áreas que no eran productivas y que ahora serán productivas”, detalla.

De igual manera, expresa satisfacción por dar certeza del acceso al agua al pueblo Yaqui y promover la dotación de agua potable para la zona de Calakmul.

“Tenemos un proyecto de agua potable para Calakmul que es una zona completamente turística y no tienen agua potable suficiente. Se va llevar agua potable a todas las comunidades rurales, pero también para el desarrollo futuro de esta región”, explica.

En la Comarca Lagunera destaca que se lleva a cabo un proyecto para erradicar la presencia de arsénico en el agua que se abastece a la población.

La funcionaria, quien es ingeniera ambiental con maestría en control de la contaminación y doctorado en tratamiento de aguas residuales, también celebra que México cumplió en 2020 con el pago de agua a Estado Unidos que establece el Tratado de 1944, aunque es importante recordar que esto detonó un conflicto entre el Gobierno Federal y agricultores de Chihuahua el cual derivó en el asesinato de una mujer campesina.

En tanto, en la lista de los pendientes que deja en la Conagua hay uno que enfatiza: la necesidad de fortalecer a la Dependencia con perfiles técnicos.

“Hay que reforzar técnicamente a la Conagua. Esta es una institución técnica (…) Se necesita un súper nivel en el área técnica, tradicionalmente lo ha tenido”, subraya.

La demanda de fortalecer a la Conagua con perfiles técnicos la hace Blanca Jiménez semanas después de que el Presidente Andrés Manuel López Obrador nombró a un integrante de la Ayudantía, Antonio Zamora Gayosso, como nuevo Subdirector Jurídico, sin tener ninguna experiencia en el sector hídrico.

“Realmente todas las áreas ( requieren fortalecimiento técnico). Por ejemplo, en el área jurídica no es nada más tener un abogado, es tener un abogado que sepa de agua. El área administrativa tiene que tener conocimiento de la administración pública y creo que se tiene que reforzar y se tendrá que ir trabajando por medio de cursos de capacitación interna”, agrega.

Además, en 2020 el Presidente nombró a cinco nuevos subdirectores de la Conagua.

Los nombramientos fueron los siguientes: Aarón Mastache Mondragón, quien funge como subdirector general de Infraestructura Hidroagrícola; Elena Burns Stuck, subdirectora general de Administración del Agua; German Martínez Santoyo, subdirector general de Administración; Jacinta Palerm Viqueira, subdirectora general técnica y José Mario Esparza Hernández, subdirector general de Agua Potable y Saneamiento.

Este grupo de subdirectores de la Conagua solicitó, hace unas semanas, una audiencia al Presidente para informarle sobre las personas y los intereses que estarían ocasionando la pérdida de confianza y efectividad de la Dependencia.

“El Presidente habrá escuchado, si lo hizo, a las gentes que lo habrán informado. Su conclusión es que no merecía más tema”, afirma Blanca cuando se le pregunta qué opinión tiene respecto a la audiencia solicitada por los subdirectores a su cargo.

Pie de foto: Blanca Jiménez Cisneros, directora de la Conagua
Pie de foto: Blanca Jiménez Cisneros, directora de la Conagua

 

SE VA OTRO DIRECTOR DE CONAGUA Y NO HAY REFORMA A LA LEY DE AGUAS

Aunque desde 2012 el Congreso está obligado a reformar la Ley Nacional de Agua para garantizar el cumplimiento al derecho humano al agua que tienen todos los mexicanos, Blanca Jiménez Cisneros se suma a la lista de directores general de la Conagua que no pudieron ver concretada esta reforma legal.

Más que un tema de reforma a la Ley, la funcionaria considera que es un tema de voluntad política y se dice satisfecha porque, a pesar de que no hay cambios legislativos para incorporar el derecho humano al agua, durante su gestión sí pudo garantizar el acceso al líquido entre la población más vulnerable.

“Con lo que me voy es que pudimos apoyar el derecho humano al agua y al saneamiento sin tener que hacer modificaciones a la ley. Es un tema de voluntad política.

Lo que sí hizo la Conagua es asegurar que la gente tenga una cantidad reservada para el derecho humano al agua y el Presidente firmó un decreto en el que todo mundo tiene derecho a 100 mil litros por habitante por día”, explica.

En su opinión, no basta con reformar la legislación de Aguas Nacionales ya que se debe asignar los recursos para que los Estados y los Municipios doten el servicio.

“Tendría que ser una ley que fuera consensuada con todas las partes, que se abocaran específicamente al derecho humano al agua, pero no basta con ponerlo solo en la ley sino también que se den los recursos. También aquí hay que responsabilizar al legislativo para que asigne recursos etiquetados para que los municipios y los gobiernos de los Estados doten el servicio”, señala.

En algunas zonas del país, expone que el acceso al agua está limitado por los gobiernos locales dejaron de pagar el costo de la energía eléctrica.

LLUVIAS 2021 Y VULNERABILIDAD

La temporada de lluvias 2021 empezó el 15 de mayo en el océano Pacífico y el 9 de junio inicia en el océano Atlántico, aunque México ya resintió los efectos de un primer huracán “Andrés” que dejó escurrimientos de agua en Colima, Guanajuato y Michoacán.

Sin embargo, la directora general de la Conagua anticipa que se prevé la formación de entre 15 y 20 huracanes por el Atlántico y de 14 a 20 por el Pacífico, lo cual obliga a visibilizar aquellas zonas vulnerables de inundación debido a la exposición que tienen frente a estos fenómenos.

“Por el lado del Golfo me preocupa toda la península prácticamente todos los huracanes que pasan por ahí nos afectan todos los estados de la península también Chiapas y Tabasco y luego también Tamaulipas. Por el lado del Pacífico, toda la costa, desde Oaxaca hasta Sinaloa.

Luego hay otros huracanes que atraviesan la península de Baja California y se nos pasan a Sonora, son los menos, pero son zonas muy sensibles porque están muy expuestas”, señala.

La mejor manera de enfrentar la temporada de lluvias 2021, dice, es estar alerta de los mensajes que emita Protección Civil.

Pie de foto: Maquinaria de Conagua brindando apoyo en zona inundada.
Pie de foto: Pie de foto: Maquinaria de Conagua brindando apoyo en zona inundada.

CAPTACIÓN DE AGUA DE LLUVIA Y RESILENCIA

México es tan diverso que mientras en unas regiones se acentúa la vulnerabilidad durante la temporada de lluvias, otras aprovechan para hacerse más resilientes y captar la mayor cantidad de agua posible.

En los próximos meses, 91 localidades de 44 municipios en 10 entidades federativas intentarán captar la mayor cantidad de agua de lluvia en 882 sistemas instalados a través del Programa Nacional para Captación de Agua de Lluvia y Ecotecnias en Zonas Rurales (Procaptar)

“Un ejemplo son las comunidades de Oaxaca y Guerrero en las zonas de población indígena y afromexicana. Estos sistemas que instalamos son los de la Conagua. También hay en Puebla”, añade Blanca Jiménez.

La población objetivo de Procaptar es aquella localizada en las zonas rurales de México, que se encuentran bajo condiciones de alta y muy alta marginación, así también que presentan lluvias anuales acumuladas iguales o mayores a mil 500 y mil 200 mililitros.

“Sin duda el tema de captación de agua de lluvia es muy importante sobre todo en comunidades donde llueva suficiente y tengan un almacenamiento apropiado. Esta agua se puede utilizar para las actividades diarias o guardarla para la época de secas que es cuando la necesitamos”, indica.

En la recta final de su paso por la Conagua, Blanca Jiménez Cisneros reconoce que la gestión hídrica en México todavía enfrenta muchos desafíos, uno de ellos relacionado con el cambio climático, tema que, asegura, abordará desde su nuevo cargo como embajadora de México en Francia.

Pie de foto: Sistema de captación de agua de lluvia
Pie de foto: Sistema de captación de agua de lluvia

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