Después de cuatro años de una investigación exhaustiva en torno a la Petición sobre la Aplicación Efectiva de la Legislación Ambiental del proyecto City Center León, que implicó una respuesta del Gobierno de la República, así como las opiniones de los gobiernos del estado y del municipio, la Comisión para la Cooperación Ambiental de América del Norte -organismo creado en el marco del Tratado de Libre Comercio (ahora T-MEC) y cuyo Consejo se integra por las autoridades federales de medio ambiente del más alto rango de Canadá, Estados Unidos y México- concluyó que el gobierno de León, Guanajuato no era la autoridad competente para evaluar y autorizar este megaproyecto que ya irrumpe en el espacio urbano.

León, Guanajuato. Aquí, junto a estas imponentes torres, hay agua. El megadesarrollo inmobiliario City Center, uno de los flujos de inversión más esperados en esta ciudad, se construye a un costado del cuerpo de agua del parque “Los Cármamos” que se localiza aproximadamente a 500 metros al sur de la cortina de la presa El Palote, entre los arroyos Hacienda de Arriba y Los Castillos, ambos pertenecientes a la misma microcuenca.

Hace apenas un par de años, el cuerpo de agua del parque “Los Cárcamos” lucía despejado en sus alrededores. No era extraño caminar por aquí y contemplar aves, entre ellas algunas garzas y patos migratorios reposando en estas aguas quietas, pero hoy el panorama es distinto.

De pie, frente al estanque, el paisaje urbano ya no luce despejado. Ahora, desde aquí, la mirada choca con una alta edificación construida a diferentes escalas. Se trata de la primera etapa del proyecto City Center León del grupo México Retail Properties que está próxima a inaugurarse.

Este megadesarrollo que se construye sobre la vía federal Libramiento José María Morelos, contempla la construcción de una torre residencial con departamentos de entre 70 y 120 metros cuadrados, una torre de 16 niveles para oficinas, un hotel full service con 200 habitaciones y otros negocios con 126 recámaras.

Vista panorámica de City Center. Crédito: Francisco Picón
Vista panorámica de City Center. Crédito: Francisco Picón

Por supuesto, el gran plus de quienes residan o visiten City Center es gozar esa sensación de estar en contacto con la naturaleza que ofrece el ecosistema del parque “Los Cárcamos” con su espejo de agua rodeado de vegetación achaparrada y unos pastos esbeltos que se elevan de manera vertical y que en conjunto conforman un estanque muy atractivo para las aves.

Los inversionistas ya ofertan el paisaje natural del parque. En su sitio de internet presumen que su proyecto inmobiliario cumple con estándares internacionales de cuidado con los recursos naturales buscando minimizar el impacto ambiental e incluso aspiran a alcanzar una certificación LEED plata.

“El objetivo de la constructora es tener un desarrollo con características únicas en México, en donde además del éxito comercial, sea un excelente producto para quienes lo habiten, trabajen en él o lo visiten, pero también para quienes viven alrededor, gracias a que el Parque de los Cárcamos contará con nueva infraestructura que promoverá el desarrollo social y la inclusión, respetando siempre el cuerpo de agua”, se lee en el sitio web de los inversionistas.

Previo a su próxima inauguración, consorcios nacionales e internacionales ya anuncian su llegada al City Center. En una de las cuatro torres que contempla este desarrollo ya se lee el logo de “BBVA”,  filial de la entidad financiera española Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA).

Otras marcas trasnacionales como “Smart Fit” la red de gimnasios más grandes fuera de Estados Unidos, “Cinépolis” la cadena de cines con presencia en México y otros 394 países, “Telcel” la operadora de telefonía móvil e incluso negocios locales como las cafeterías “Starlight”, ya promocionan su presencia aquí.

Todavía no se inaugura y este proyecto inmobiliario que aglutina-servicios, locales, hotelería, oficinas comerciales, vivienda, lugares de ocio, esparcimiento y diversión- ya transformó el espacio urbano en esta ciudad cada vez más asfixiada por su creciente parque vehicular, sus hornos ladrilleros, sus políticas públicas que apuestan por la tala de árboles urbanos para privilegiar el uso del automóvil y por su estrés hídrico que se agudiza con la sobreexplotración de sus aguas subterráneas.

“León es una ciudad con una profunda desigualdad social, es uno de los municipios entre los más pobres del país o el más pobre del país, es una ciudad donde hay grandes problemas de agua y por esto hace años se quería traer agua a través de la presa Zapotillo y esta obra no va a beneficiar en nada ninguno de estos problemas que están justamente en el centro del derecho a la ciudad, el derecho a permanecer, el derecho a una ciudad no expulsora de población”, plantea Silvia Emanuelli coordinadora para América Latina de la Coalición HIC (Coalición Internacional por el Hábitat).

BBVA ya tiene presencia en el City Center. Crédito: Francisco Picón
BBVA ya tiene presencia en el City Center. Crédito: Francisco Picón

 

“Los Cárcamos” es uno de los escasos parques gratuitos de manera permanente en León. Su origen se remonta a 1953, cuando de los terrenos en los que ahora se ubica, se extrajo tierra para formar el borde de la presa El Palote. Durante algún tiempo, lo que hoy es la parte norte se utilizó como relleno sanitario, antes de ser cedida al municipio; posteriormente, se formó en dicha zona un cuerpo de agua en el que se introdujeron peces. La sección sur también se donó al municipio, a cambio de la autorización del fraccionamiento Hacienda del Campestre, que colinda con el parque en su lado oriente.

Hoy, en esta reserva ecológica de 11 hectáreas dominadas por lomas a desnivel, es común escuchar el eco de los patos que graznan en el estanque, contemplar el vuelo de las garzas, sortear a las ardillas, caminar entre periquillos que buscan algo de comer. Se trata de una fauna que convive con los visitantes que aprovechan la sombra de los árboles para sentarse a comer o simplemente a descansar, mientras unos más hacen deporte y otros aprovechan para pasear a sus mascotas. Ahora, el City Center se apropia de esto, mercantiliza lo público y desafía a la naturaleza con sus imponentes torres cuya construcción ya obstaculiza el vuelo de las aves.

Mediante un pasillo que conecta al proyecto inmobiliario con el parque, el City Center consolida un modelo de ciudad que naturaliza la privatización de las áreas verdes urbanas.

“¿Por qué nos preocupa este proyecto?, porque justamente va usar una gran cantidad de agua cuando ya hay problemas de agua en la ciudad. Porque, además, esta es una ciudad con fuerte déficit en el espacio público y hoy el humedal (Parque Los Cárcamos) es un espacio para el esparcimiento, las personas lo han hecho suyo. Es un espacio público, es un espacio a donde no se tiene que pagar para pasar un rato, pero, además, estas torres se van a anclar cerca de colonias populares y normalmente estos proyectos implican muchos cambios a sus alrededores, por ejemplo, incremento en el precio del suelo, va empeorar el tema de la movilidad y el proyecto sigue impulsando el modelo de ciudad para unos pocos”, agrega Silvia.

La organización Acción Colectiva Socioambiental A.C. inició en 2018 la defensa del parque “Los Cárcamos” y su cuerpo de agua tras advertir que está siendo afectado por la construcción del megaproyecto City Center. Su activismo resultó fundamental para que el caso fuera analizado por las autoridades federales de medio ambiente del más alto rango de Canadá, Estados Unidos y México en el seno de la Comisión para la Cooperación Ambiental de América del Norte (CCA) organismo creado en el marco del Tratado de Libre Comercio (ahora T-MEC).

City Park junto al cuerpo de agua de "Los Cárcamos" Crédito: Francisco Picón
City Park junto al cuerpo de agua de “Los Cárcamos” Crédito: Francisco Picón

 

EXHIBEN INCOMPETENCIA DE LEÓN PARA EVALUAR IMPACTO AMBIENTAL

Por primera vez en la historia de esta ciudad, las autoridades municipales de León fueron exhibidas vía el T-MEC como incompetentes para evaluar y autorizar el permiso de impacto ambiental para un megadesarrollo inmobiliario como el City Center.

En un expediente de hechos elaborado por el Secretariado de la CCA con base en las disposiciones previstas en el capítulo 24 del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), autoridades federales del más alto rango concluyeron que la Dirección General de Gestión Ambiental del municipio de León (ahora, Dirección General de Medio Ambiente, DGMA) no era la autoridad competente para conocer, sustanciar y resolver el procedimiento de evaluación del impacto ambiental.

Tras visitar el sitio del proyecto inmobiliario y solicitar información a las autoridades municipales, a la Secretaría de Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial (SMAOT) y a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), el Secretariado de la CCA determinó que no se demostró que el proyecto City Center esté incluido en las actividades que contempla el Programa Municipal de Desarrollo Urbano y Ordenamiento Ecológico y Territorial de León.

Una de las torres del City Center León. Crédito: Francisco Picón
Una de las torres del City Center León. Crédito: Francisco Picón

 

La Dirección General de Gestión Ambiental de León (ahora, Dirección General de Medio Ambiente, DGMA) fue incapaz de comprobar ante el Secretariado de la CCA que, en la resolución de impacto ambiental que aprobó para el City Center, se previó la compatibilidad del proyecto con las modalidades, restricciones y condiciones aplicables en función de los criterios ambientales y de ordenamiento territorial.

Por su parte, la SMAOT intentó justificar que no interfirió en el procedimiento de evaluación de impacto ambiental de este proyecto debido a que existía un Convenio de Coordinación entre el Estado y el Municipio mediante el cual se transferían atribuciones a las autoridades de León para realizar esta tarea.

Sin embargo, las autoridades municipales no evaluaron el impacto ambiental conforme a la legislación estatal y federal. Además, omitieron la aplicación efectiva del procedimiento de consulta pública, libre e informada que establece la legislación ambiental.

“No se encontró información alguna que indique que se haya realizado una reunión de consulta pública en relación al proyecto City Park (City Center)”, apunta el Secretariado de la CCA en el expediente de hechos.

Tras una revisión exhaustiva, el Secretariado de la CCA explica que tampoco pudo constatar que el expediente de impacto ambiental integrado por las autoridades municipales para este proyecto haya contado con todos los documentos requeridos.

Entre los faltantes se encuentran los avisos de inicio de la etapa de preparación del sitio y de terminación de la etapa de construcción, el acta de la reunión pública de información, así como comentarios y observaciones que, por escrito, hubiesen formulado los participantes en la misma ni modificaciones al proyecto que se hubiesen realizado.

De igual manera, no se encontró las constancias relativas a las garantías otorgadas e informes rendidos tanto por el titular de la resolución como por el prestador de servicios técnicos ambientales.

La CCA es un organismo que promueve la cooperación de México, Estados Unidos y Canadá en la protección al medio ambiente.

La señalética de City Center en el parque "Los Cárcamos" Crédito: Francisco Picón
La señalética de City Center en el parque “Los Cárcamos” Crédito: Francisco Picón

 

Gustavo Lozano, coordinador de la organización Acción Colectiva Socioambiental A.C, afirma que el expediente de hechos les da esperanzas para continuar con la búsqueda de justicia.

“La información que arroja el expediente de hechos nos permite confirmar que el gobierno municipal de León no contaba con las atribuciones necesarias para autorizar el impacto ambiental del proyecto así como que, durante la evaluación que realizó, pese a que no tenía competencias, no hizo lo suficiente para garantizar los derechos humanos a la información y a la participación violentando la Ley General para el Equilibrio Ecológico y del Medio Ambiente que es reglamentaria del artículo cuarto de la constitución. El expediente de hechos es un documento que nos da esperanzas y que nos acompañará para la búsqueda de justicia”, enfatiza.

Dolores Rojas Rubio, coordinadora de programas de la Fundación Heinrich Böll, lamenta que proyectos inmobiliarios como el City Center prosperen en el contexto de la crisis climática dominada por las olas de calor, estrés hídrico y cambio climático.

“Vemos muy preocupante que igual que en cualquier proyecto mega extractivo, no se consulta a las comunidades, no se les informa los impactos que puede tener en su vida, en su territorio, en sus derechos al medio ambiente y a la salud que se ven directamente que se ven impactados. Yo creo que sí puede haber una forma distinta de ocupar de manera más humana las ciudades”, afirma.

El punto más crítico de este proyecto inmobiliario, advierten los activistas, es que el cuerpo de agua del parque “Los Cárcamos” pierda la funcionalidad de sus servicios ambientales.

HUMEDAL, ¿SÍ O NO?… CONAGUA DICE “NO”

Para la organización Acción Colectiva Socioambiental A.C. no hay duda, el cuerpo de agua del parque “Los Cárcamos” es un humedal porque se alimenta de las corrientes subterráneas de la presa El Palote que sí es un bien nacional, pero la Comisión Nacional del Agua (Conagua) niega que se trate de un ecosistema con estas características.

El Secretariado de la CCA tampoco pudo acreditar que se trate de un humedal debido a que no encontró documentación que lo identifique como tal y tampoco figura en el listado de la Convención Relativa a los Humedales de Importancia Internacional (Convención Ramsar).

“Resulta que aunque huele a humedal, sabe a humedal, tiene plantas de humedales, suelo de humedales, agua de humedales, agua de humedales, pues no hay ninguna autoridad que lo reconozca como humedal de modo que eso no le da competencia a la Federación para intervenir”, explica Gustavo Lozano, coordinador de la organización Acción Colectiva Socioambiental A.C.

Más allá de si es o no un humedal, lo cierto es que el cuerpo de agua del parque “Los Cárcamos” es el eje rector del ecosistema que favorece la interacción de las especies y los procesos simbióticos naturales.

Infraestructura de City Center en parque "Los Cárcamos" Crédito: Francisco Picón
Infraestructura de City Center en parque “Los Cárcamos” Crédito: Francisco Picón

 

CIUDADANÍA AL RESCATE DE “LOS CÁRCAMOS”

Desde el 16 de abril de 2002, el proyecto City Center cuenta con una prórroga de 32 meses concedida por la Dirección General de Medio Ambiente de León para concluir con las obras ilegalmente autorizadas por el gobierno municipal.

Gustavo Lozano, coordinador de la organización Acción Colectiva Socioambiental A.C, anticipa que, de no ser suspendido el proceso de construcción ahora, los inversionistas podrán prolongar sus trabajos hasta marzo de 2025 cuando la primera etapa debió concluir en 2021.

“Consideramos que estamos a tiempo de que el daño e incluso el impacto causado al humedal pueda ser remediado. Hacemos un llamado respetuoso a Alejandra Gutiérrez, la presidenta municipal de León, para que, en el ámbito de sus atribuciones, revise la resolución otorgada en la Administración de Héctor López Santillana, así como el notable incumplimiento de la empresa México Retail Properties respecto de las condicionantes que le fueron impuestas por el gobierno al momento de autorizarle el proyecto City Center”, propone.

Pedro Moctezuma Barragán, investigador en la Universidad Autónoma Metropolitana e integrante de la Coordinadora Nacional Agua para Tod@s Agua para la Vida, apuesta a que los leoneses se unan en defensa del parque “Los Cárcamos” a través de una contraloría ciudadana y se rescate la totalidad del ecosistema.

“La idea es consolidar a Los Cárcamos como un humedal con servicios ambientales con un aspecto de protección civil, como un espacio de recreación y de salud pero que además contagie a su ambiente y lograr una visión de que no sea una isla sino un archipiélago de humedales, de arboledas, de parques, asociando Los Cárcamos con la presa del Palote que tiene espacio para estos humedales y poder efectivamente rescatar a la ciudad”, plantea Pedro.

No es solo una lucha ambiental, recalca, es una lucha también por el agua.

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